- Views104
- Likes0
El ecuador de diciembre marca el momento de recapitular y hacer balance de los lanzamientos de álbumes que se han producido en la primera mitad de año. En esta primera parte de la lista de los mejores discos de 2016 seleccionamos y exponemos alfabéticamente aunando internacional y nacional lo que son para Oceaund los 25 mejores.
Puedes escuchar la playlist de esta lista en Spotify.
ANOHNI es una artista de esas que hacen grande a la música. Tras lanzar cuatro discos como Antony and the Johnsons, la cantante vuelve con un debut diferente que no pretende gustar a todos y, ya de paso, criticar los males del mundo como el machismo o la pena de muerte. Así es Hopelessness, artístico, acusador pero a la vez atractivo. El coqueteo con el pop parece llegar en el momento adecuado lo que consigue firmar un disco extraordinario.
Con el EP Dora del año pasado ya lo veníamos imaginando, BeGun ha dado un salto cualitativo importante que se ha visto reflejado en su peculiar manera de hacernos vivir sus producciones. AMMA (madre en lengua de Ghana) ha confirmado lo que sabíamos, si alguien puede hacernos soñar a través de la música electrónica, ese es BeGun. El catalán, caracterizado por su sonido ambiental, pulido y cuidado, pausado y enérgico a la vez; ha optado en su nuevo trabajo por seguir su línea habitual, aportando mayores tintes geográficos y así haciéndonos partícipes de un paseo por la sabana africana a través de sus temas. Si algo parece caracterizarle además, es que no se deja nada en el tintero a la hora de producir: cada tema es único, y cada uno logra transmitir sensaciones, lugares, momentos diferentes, una experiencia para disfrutar, sea en el sofá, sea bajo un cielo estrellado.
Hamen, el segundo trabajo del cuarteto vizcaíno, ha demostrado (y sigue haciéndolo) que Belako se han alzado como estandarte de la música indie en el País Vasco. No es difícil darse cuenta al escuchar el trabajo la cultura musical que llevan a las espaldas y disfrutar en directo de la simbiosis de electrónica y rock, toda una delicia para el aparato auditivo. Sin duda, un buen año para los de Mungia y un futuro más que prometedor dentro y fuera del panorama nacional.
Para Bloc Party Hymns supone un pequeño giro en algunas de sus canciones, fuera de lo que nos tienen acostumbrados a bailar.Bloc Party han formado parte del pedestal de la música inglesa, saliendo de los esquemas del clásico indie acentuado de grupos que siguieron el mismo camino evolutivo, como pudo ser Pulp hasta llegar a bandas como Arctic Monkeys o Franz Ferdinand. Hymns confirma que Bloc Party siguen sentados en su trono permitiéndose realizar nuevos cambios, las esencias siguen presentes, la fina electrónica tiene destellos de oscuridad, sin aburrirse y sin aburrir a nadie.
Tres días antes de su lanzamiento previsto, Dev Hynes, la maravillosa cabeza pensante de Blood Orange (su proyecto en solitario), sacó a la luz su último trabajo, Freetown Sound. En el disco, completamente compuesto, escrito, instrumentalizado, producido y mezclado por Hynes, encontramos colaboraciones del tamaño de Empress Of, Carly Rae Jepsen, Nelly Furtado o Debbie Harry de Blondie. Y de un modo u otro, pasa del hip-hop al jazz, al soul, al R&B o al funk, siendo una especie de sucesor espiritual de To Pimp a Butterfly, el excelente trabajo que Kendrick Lamar sacó en 2015. Una joya a la altura de lo esperado, y seguramente uno de los álbumes del año.
Por encima del skyline neoyorkino, una grandiosa polilla se alza protagonista de la portada de Moth, el tercer álbum de Chairlift. La vulnerabilidad del animal se convierte en un símil que el dúo formado por Caroline Polachek y Patrick Wemberley transmiten en este trabajo, marcado por un compendio de géneros como el R&B, el house, y voces que se contorsionan mejor que en Does You Inspire You y en Something. Parece que Polachek se ha percatado del potencial de su característica voz y la aprovecha. Moth es un álbum inevitable, por el que el dúo tenía que pasar para dar a luz un futuro disco de pop con profundidad en sus líneas y diferentes estilos que coexistan. Aunque es evidente que el sonido del grupo ha evolucionado, aportando mayor carga emocional y un esfuerzo casi palpable.
Chance The Rapper fue la sorpresa más grata del último álbum de Kanye West, el polémico The Life Of Pablo. En la primera canción, ‘Ultralight Beam’, el verso de Chance destaca por encima de todos. Una de las frases es «He [Kanye] said let’s do a good ass job with Chance three/I hear you gotta sell it to snatch the Grammy/Let’s make it so free and the bars so hard/That there ain’t one gosh darn part you can’t tweet». Dicho y hecho, Chance, Kanye y otros raperos como Kaytranada a la producción han unido fuerzas para sacar una mixtape de hip-hop/gospel que ha recibido halagos por parte de toda la crítica. Con colaboraciones de la talla del mismo Kanye West, de Justin Bieber o de Future, Chance The Rapper se ha establecido como uno de los raperos más en forma del panorama musical.
Daughter necesitaban dar un pequeño giro a su sonido, madurar y consolidarse, y así lo han hecho. En este Not To Disappear muestran cortes que ensucian el minimalismo característico del trío y consiguen que las guitarras, más presentes y enérgicas, se hagan paso entre la voz de Elena Tonra. El continuo relato de una experiencia cruel que más que atrapar se desinhibe para alcanzar una atmósfera más lumínica y hace inevitable la comparación con el lado más oscuro de Florence and the Machine. El equilibrio de las composiciones, la etérea voz y las angustiosas letras que describen un ambiente frágil hacen de este segundo álbum un trabajo perfeccionado.
El disco despedida de David Bowie no defraudó a sus seguidores más fieles. Estrenado tan sólo dos días antes de su fallecimiento y coincidiendo con su sexagésimo noveno cumpleaños, Blackstar ★ ha supuesto la despedida de una de las leyendas más grandes de la historia de la música. Producido por su inseparable amigo y productor Tony Visconti, las siete canciones que componen el álbum cuentan con un tono vanguardista a la par que oscuro y con unas claras referencias a la muerte, incluso en algunas ocasiones pueden recordarnos a algunos temas de su trilogía berlinesa.
Tras cuatro años de silencio la banda dream pop neoyorquina DIIV estrenó el pasado mes de febrero su segundo trabajo Is The Is Are. Zachary Cole Smith y los suyos regresaron con lo que consideraron «el mejor disco de su carrera», sin embargo, contradiciendo a Smith, de los 17 temas con los que cuenta el disco, tan sólo merecen mención especial unos pocos como el tema homónimo ‘Is The Is Are’, ‘Under The Sun’ o ‘Blue Boredom’ que cuenta con la participación de Sky Ferreira. Tras la larga espera y muchas expectativas este disco deja con ganas de más.
El decimoséptimo trabajo discográfico de Iggy Pop supone un antes y un después en los discos del artista norteamericano. Lejos, muy lejos quedan los ritmos rockeros de los 70 a los que nos tenía acostumbrados. Post Pop Depression ha terminado siendo el resultado de un experimento comenzando por sus miembros, el batería de Arctic Monkeys, Matt Helders, y el líder de Queens of the Stone Age, Josh Homme, además de la sucesión de una serie de temas que a veces parecen recordar a Stooges y a otras a Queens.
La irrupción de James Blake en la escena musical británica supuso un antes y un después en la electrónica. Con Overgrown se asentó e implantó un concepto basado en pequeños fragmentos de melodías que daban forman, junto con su frágil y nostálgica voz, a un ente mayor. En The Colour In Anything Blake ha encontrado la luz, o al menos la tonalidad de colores en el gris que buceaba. No nos engañemos, sigue hablando del amor, de hecho, una ruptura es el hilo conductor en estos 17 cortes pero dista mucho de resultar repetitivo. La elegancia de Blake sigue perenne, intacta, pero viaja entre canciones diversas que elogian a un compositor en su mejor momento.
Jo Competeixo, el cuarto álbum de los catalanes Manel, llegó entre suspiros de preocupación de los seguidores del sonido folk acústico que definía al grupo desde sus inicios. Un primer adelanto nos dejó entrever un cambio radical de sonidos, del ukelele a los sintetizadores, y efectivamente, la diferencia es abismal. Eso sí, la calidad no se ha perdido, los barceloneses siguen siendo el grupo más en forma del panorama catalán y con este disco han callado la boca a críticos y detractores demostrando que sólo compiten para ganar, y Manel siempre ganan.
Desde aquel High/Low han pasado 20 años, un número que lleva a reconocer que Nada Surf han hecho –y siguen haciendo- algo bien. Los neoyorkinos abrazan la tristeza mientras rozan con la yema de los dedos la esperanza, llevan haciéndolo casi un cuarto de siglo y podría haber resultado incómodo a estas alturas sino hubiese sido por la estelar aparición del veterano guitarrista Doug Gillard, que ha aportado un golpe de energía y de esplendor a la formación. No importa que la banda esté cerca de su 25 aniversario y su líder cerca de los 50, siguen alimentando ese amor que quieren o ese que se fue. El dolor de una ruptura sigue resonando en ellos y You Know Who You Are es la reafirmación hecha álbum.
Sin dejar de lado la guasa y sin querer grabar el mismo disco de garage una y otra vez, Campeones del Mundo ha supuesto un pequeño desvío en el viaje musical de Novedades Carminha. Los gallegos están confirmados en un gran número de festivales y por algo será. Con aires playeros y un desdén romanticón, este disco es una oda a los ritmos calientes y al amor, sin dejar de lado su discurso habitual y riéndose de todos aquellos que fardan de ser los mejores en algo. Nuevos sonidos con buen resultado para escuchar este verano.
Después de un decepcionante EP llamado Monastic Living, todo fan del grupo neoyorkino Parquet Courts temía lo que se avecinaba. Dos geniales álbumes (tres, si contamos el que sacaron bajo el pseudonimo de Parkay Quarts) avalaban al grupo, pero su último cambio de trayectoria parecía indicar que los derroteros irían por otro camino. Al final resultó que no, y Parquet Courts sacaron uno de los discos más destacados del año sin olvidar ni un momento su característico sonido, su demoledoras y mordaces letras y su calidad indiscutible que les ha llevado al Olimpo de las bandas de la Gran Manzana.
La vuelta al ruedo de PJ Harvey es uno de los acontecimientos musicales del año sí o sí. La británica apuesta con su The Hope Six Demolition Project por un sonido diferente, alejado de las guitarras. No hay que olvidar su mensaje en forma de protesta política que tanto ha enfadado en Washington. Folk de orquesta con toques íntimos ejecutados con una precisión milimétrica, sin ninguna duda es una seria candidata a firmar uno de los discos del año.
La performance que decidieron hacer Radiohead la primera semana de mayo tuvo como objetivo promocionar su noveno trabajo, A Moon Shaped Pool. La banda sólo conoce un verbo: arriesgar, y así lo plasman en 11 canciones donde se encuentra alguna vieja conocida por los fans. La inclusión de instrumentos de cuerda en algunos cortes aumentan la magnitud del álbum. En pocas palabras, Radiohead lo ha vuelto a hacer.
Este cuarteto femenino de las islas británicas tuvieron el honor de lanzar el primer gran disco del año allá por enero. Adore Life es un álbum que sigue la estela de su debut, pero eso no tiene nada de malo. Suenan con fuerza y fiereza sobre todo gracias a la energía en la voz de Jehnny Beth. Savages podrían ser consideradas la nueva gran banda del movimiento riot grrrl que quedó en el olvido en los años noventa.
La fusión entre la narrativa cinematográfica y la musical no es nueva, pero quizás no estemos acostumbrados a que se produzca a este nivel de calidad. Al igual que hizo Björk con Bailando en la oscuridad, Sílvia Pérez Cruz ha conseguido crear un álbum con historia propia partiendo de la banda sonora compuesta por ella misma de la película de Eduard Cortés, Cerca de tu casa. En Domus la artista vuelve a poner de manifiesto su inagotable imaginación y sus ganas de seguir probando, así como un talento arrollador para entretejer estilos y formas, afianzándose como una de las voces más prometedoras del país.
Isa, Rodrigo, Zippo y Rafa forman Triángulo de Amor Bizarro. Directos desde Galicia, solo han necesitado cuatro álbumes para convertirse en la mejor banda del panorama nacional actual. Con el último, Salve Discordia, los gallegos han llegado a niveles a los que pocas bandas españolas han llegado, expandiendo su sonido mezcla de shoegaze y post-punk para tocar temas feministas, eurocentristas o mitológicos, con canciones que directamente van a los anales de la historia del grupo como ‘O Salve Eris’ o ‘Baila Sumeria’. Un must de este año, ya no solo a nivel nacional, sino a nivel internacional.
Los californianos están viviendo una segunda juventud en lo musical. Dos años después de su anterior trabajo publican White Álbum, siguiendo la el camino de sus discos hómonimos y coloridos. Weezer continúan con ese sonido americano característico pero con un Rivers Cuomo que se desgañita a la vez en unos cuantos temas. Pese a que no sea la panacea entre su discografía este decimosegundo álbum es perfecto para estos meses de verano.
«Those golden days snuck away from us», canta Julien Ehrlich en la tercera canción del disco debut de Whitney, ‘Golden Days’. El disco, llamado Light Upon The Lake, esboza la presentación al mundo de la banda formada por el propio Ehrlich, antiguo batería de Unknown Mortal Orchestra, y Max Kakacek, ex miembro de Smith Westerns. Su música, casual y melancólica, encaja perfectamente en un día de verano, otoño, invierno o primavera, creando esa sensación de ser el tipo de música que necesitas justo cuando la necesitas. Así, como pueden ver, la frase no puede estar más lejos de la realidad: los días dorados de Whitney acaban de llegar.
Con aires mexicanos, así es como presentaron Woods su nuevo trabajo, City Sun Eater in the River of Light, su noveno disco. Parece que los estadounidenses han cogido carrerilla y como ya nos tienen acostumbrados, cada dos años estrenan nuevo trabajo, y ya tocaba. Repleto de sonidos de trompetas y ukeleles, el disco de Jeremy Earl y su banda no ha defraudado. El grupo, que poco a poco ha conseguido ser uno de los más importantes del momento, derrocha personalidad y carácter. Tras varias escuchas y algunas reflexiones se puede decir que este es el mejor trabajo hasta la fecha de Woods, que se superan con el paso del tiempo.
Alas Salvation confirma que esta banda londindese es prometedora y probablemente ocupe esa lista mental que tenemos de grupos para ver en vivo y directo en poco tiempo. Consolidándose en Glastonbury como tal, su nervioso y magnético garage-rock, el cual ha conseguido encandilar al mismísimo Jack White, confirma que Inglaterra sigue teniendo ese je ne sais quoi que hace que las bandas que se forman entre sus fronteras contengan una magia especial. Reserva un espacio en tu colección de discos para Yak, porque te llenará de orgullo enseñárselo a tus nietos.