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Por Alfonso Alfaro
Es cierto que los festivales no son dados a celebrarse en otoño, pero el BIME Live es la excepción. Nuevamente acomodado en un marco de feria musical para los expertos de la industria musical, el BEC de Baracaldo acoge otro año más este evento con la mejores bandas que se encuentran de gira. Pese a que no sea una fecha veraniega, el festival ha conseguido reunir cabezas de cartel de la talla de Royal Blood, Franz Ferdinand o The Prodigy. Aunque también apuesta por muchas bandas de menor popularidad pero de igual importancia como las cinco siguientes.
Pablo Und Destruktion es el proyecto musical del asturiano Pablo García y una de las sensaciones musicales del año. Pese a que tiene canciones con estilo blues, el cantautor se preocupa que sus letras cuenten una historia y calen en el oyente. Es considerado uno de los músicos más innovadores tanto en el plano de la producción como en el musical.
Desde la Guipúzcoa más profunda, Rural Zombies ponen la nota local en estos imprescindibles. Tienen un sonido bailable pero lento a la vez con ritmos pegadizos. Las guitarras puntiagudas pero suaves son una seña de identidad además de la voz de Julia Urreaga. El BIME Live! es el lugar perfecto para disfrutar de ellos.
La superbanda BNQT está formada por miembros de Franz Ferdinand, Travis, Midlake, Band of Horses y Grandaddy; y desembarca en el BIME para dar su primer y único concierto en el España. Su debut, bajo el título Volume 1, y reúne todas las buenas cualidades de las anteriores bandas con la voz de Alex Kapranos a la cabeza. Estos proyectos son muy difíciles de ver así que son más que imprescindibles.
¿Qué ocurre cuando juntas el rock sinfónico de Toundra con el flamenco de El Niño de Elche? Pues que el resultado es Exquirla. Esta banda de fusión demuestra que ambos géneros pueden no solo vivir en armonía sino casar perfectamente. Ya han sido catalogados el Omega del siglo XXI gracias a su álbum Para quienes aún viven.
Transgresoras, auténticas, bailongas… Así son Las Bistecs. Promulgan un género que ellas misma definen como electro-disgustings con ritmos discotequeros y letras satíricas. Su directos son coloridos e imprevisibles, aunque una cosa es segura, es imposible aburrirse con ellas sobre el escenario.